Nuestra prioridad es que tu piel luzca joven y radiante

OUR STORY

¿EN QUÉ CONSISTE LA CONSULTA DERMATOLÓGICA ESPECIALIZADA?

Usted será atendido por la mejor especialista, durante la primer consulta se le harán preguntas acerca de la causa que lo lleva a consultar, así como antecedentes, hábitos, medicamentos y síntomas. Posteriormente, realizará una revisión detallada, con énfasis en su piel, pelo, uñas, mucosas, validándose del uso de dispositivos especialmente diseñados para la mejor evaluación como luces especiales, lupas, dermatoscopios, etc. Una vez establecido un diagnóstico se diseña un plan de trabajo personalizado de acuerdo a sus necesidades, es impórtate que usted aclare todas sus dudas para una buena comprensión de su diagnóstico y procedimientos.

ENFERMEDADES DE LA PIEL

Las enfermedades de la piel son tan amplias como el órgano al que afectan, presentando signos como irritación, obstrucción, inflamación, enrojecimiento, ardor y picazón (comezón). Por este motivo es necesario que sean tratadas por un médico especialista en el tema, como es el dermatólogo.

ROSÁCEA

La rosácea es una enfermedad con enrojecimiento e inflamación crónica de la piel, con periodos de remisión y exacerbación, los brotes generados son similares a los del acné. Se presenta principalmente en adolescentes y adultos jóvenes, comenzando con enrojecimiento en forma de rubor, vasos sanguíneos dilatados, piel grasa, poros abiertos y granitos. En casos severos la región centro facial se llega a inflamar y deformar causando baja autoestima en el paciente.

El paciente debe estar consciente que esta condición no se cura solo se controla, sin embargo, cuando se tiene un buen control, esta afección puede ser casi imperceptible. Es importante tratar las distintas lesiones que aparecen manchas rojas, vasos sanguíneos dilatados "arañitas”, pústulas y pápulas o granitos, evitando factores que exacerben la enfermedad.

ACNÉ

El Acné es una enfermedad caracterizada por lesiones no inflamatorias mínimas hasta formas inflamatorias muy severas, comedones (barros), manchas y cicatrices, la cual afecta la unidad pilosebácea, que si bien no compromete la vida de una persona, si su estado en general disminuyendo su autoestima. Inicia normalmente en la pubertad, su tratamiento depende de la cantidad de erupciones y de la frecuencia con la que aparezcan, existen distintos tipos de acné como: leves, moderados o severos, localizándose principalmente en cara, espalda, pecho, etc.

El acné moderado a severo afecta al 20 % de los jóvenes y persiste hasta los 20 años en un 64 % de los casos, y hasta los 30 años en un 43 %. Lo cual nos indica que la existencia de secuelas o cicatrices de acné es un problema latente y se presenta con mucha frecuencia en la población en general.

Es de gran importancia acudir con un especialista desde los primeros síntomas para evitar manchas, cicatrices y propagación de la infección. En la clínica dermatológica ZamSkin podemos brindarte el tratamiento adecuado para cada tipo acné y cicatrices.

CICATRICES

Las heridas pueden ser lesiones pequeñas que se reparan espontáneamente sin dejar ninguna huella o, por el contrario, lesiones muy grandes que dejan cicatrices hipertróficas, por lo que mientras más severa la herida, más complicada será la cicatrización.

Existen tres tipos de cicatrices:

Cicatriz Queloide: son lesiones de la piel formadas por crecimientos exagerados del tejido cicatricial en el sitio de una lesión cutánea que puede ser producida por incisiones quirúrgicas, heridas traumáticas, sitios de vacunación, quemaduras, varicela, acné o incluso pequeñas lesiones o raspaduras.

Cicatriz Hipertrófica: Se parece a un queloide, pero que no se extiende hasta los tejidos circundantes. Se forma por agrandamiento y sobre crecimiento del tejido cicatricial.

Cicatriz Atrófica: Son cicatrices profundas que afectan la depresión de la piel. Una cicatriz atrófica hará que la superficie de la piel se vea como si tuviera un agujero en ella. Ocurren cuando ha habido una pérdida de tejido en el lugar de la cicatriz. Las profundas cicatrices del acné son las principales causas de las cicatrices atróficas.

MELASMA

Es una hipermelanosis (aumento de melanina en epidermis) adquirida crónica, recurrente y simétrica que se caracteriza por manchas de color café claro u obscuro, principalmente en mejillas, frente y bigote, empeorando con la exposición solar sin protección. La principal causa de melasma es hereditaria, tiene una incidencia de entre 14.5 y 56 % en mujeres embarazadas, y de 11.3 a 46 % en quienes utilizan anticonceptivos orales, incluso con algunos medicamentos y cosméticos como perfumes, jabones desodorantes, etc.

Causando pigmentación por reacción fototóxica, debida a la absorción de la radiación ultravioleta por parte de la sustancia química presente en estos cosméticos, dando como resultado una pigmentación más extensa. Este padecimiento cutáneo afecta la calidad de vida del paciente.

DERMATITIS SEBORREICA

La dermatitis seborreica conocida como “caspa” es un trastorno crónico e inflamatorio de la piel con predilección en áreas ricas en glándulas sebáceas: piel cabelluda, cara, dorso de las cejas, bordes laterales de la nariz, surcos naso genianos, pecho, alrededor y dentro de los oídos, siendo un poco más severa en el sexo masculino, niños y bebés. La dermatitis seborreica en bebés es conocida como “costra de leche” apareciendo durante los 3 primeros meses de vida. Afectando al 1 % de los niños mayores de 1 año de edad en piel cabelluda, cara, axilas e inglés.

DERMATITIS EN ZONA DE PAÑAL

Es una dermatitis por contacto en el área cubierta por el pañal de forma no alérgica, causada por la combinación de factores como la humedad en el área, contacto prolongado con la orina y heces, oclusión, fricción en la zona, y bacterias en la piel. Los hongos en el área de pañal se caracterizan por la piel roja sobre todo en los pliegues de la ingle. Se sugiere cambiar el pañal a menudo, manteniendo una higiene adecuada.

DERMATITIS ATÓPICA

La dermatitis atópica (DA) es la manifestación cutánea de la atopia. La atopia se puede definir como una tendencia a reaccionar de manera exagerada (inflamación, prurito, broncoconstricción, etc.) frente a determinadas sustancias alergénicas, irritantes o fármacos. Existe una tendencia hereditaria a tener este tipo de piel; factores inmunológicos, presentando un aumento de la inmunoglobulina E (IgE), asociado con alteraciones como asma, rinitis y factores ambientales. Generando una disfunción de la piel como barrera natural con signos de enrojecimiento o eritema, inflamación o edema, piel extremadamente seca o xerosis, comezón, posterior al rascado de erosiones y excoriaciones, y cuando el proceso se vuelve crónico o no se controla liquenificación o engrosamiento de la piel.

DERMATITIS POR CONTACTO

Es una reacción inflamatoria que causa irritación y enrojecimiento de la piel, como consecuencia del contacto de la piel con una sustancia química, producidas por varios mecanismos patogénicos. Puede ser aguda con una inflamación menor a 6 semanas, durante esta fase es común encontrar la presencia de vesículas y un exudado que le da la apariencia de “piel llorosa”; cuando el estímulo inflamatorio no se resuelve y persiste el proceso más allá de 6 semanas, se vuelve crónica presentando síntomas como rascado, liquenificación (engrosamiento de la piel) y cambios en la pigmentación (manchas claras u oscuras). Existen diferentes tipos de dermatitis por contacto; irritativas, alérgicas, fototóxicas y fotoalérgicas.

ALOPECIA

Es la pérdida reversible o irreversible de folículos pilosos previamente existentes, disminuyendo la densidad capilar de manera difusa o localizada. Las alopecias pueden clasificarse en alopecias no cicatriciales, en las que el folículo piloso se conserva, y alopecias cicatriciales, en las que el folículo piloso se destruye y se sustituye por tejido cicatricial. Existen otros trastornos como efluvios, definidos por una caída de pelo mayor que la fisiológica, y que puede ocasionar o no una reducción de la densidad capilar.